El tiro y el surf: patrimonios deportivos

Los diplomas olímpicos de Mesinas y Pacheco ratifican a estas disciplinas como símbolos del Perú en la alta competencia internacional.

Mientras en Lima se celebra la llegada del bicentenario, en Tokio la bandera peruana brilla más que nunca en la Torre 9 de la Villa Olímpica desde hace ya más de una semana. Otra vez las Fiestas Patrias se celebran en modo olímpico y si bien no se ha podido repetir lo de Barcelona 1992, cuando Juan Giha logró la presea de plata un 28 de julio, cada día de competencia es una manera de homenajear a tu país.

Y qué mejor reconocimiento que los deportistas de otros países valoren lo que significa Sofía Mulanovich dentro del surf mundial y se destaque un puesto 5 de Lucca Mesinas. O también que los propios rivales consuelen al caído luego de una polémica penalidad, como a Nicolás Pacheco, mientras que Ángelo Caro devuelve el gesto y felicita a quienes supieron superarlo.

Llegó el bicentenario patrio y el Perú tiene deportes de bandera que se han lucido en Tokio. El surf se confirmó como nuestra carta y el tiro sacó todo el historial que arrastra con tres medallas olímpicas, que nos hacen sentir más que orgullosos.

—Legado de una reina—

Nos comenta el uruguayo Pablo Zanocchi, del portal Duke Surf, que el Perú y Brasil fueron las únicas delegaciones de Latinoamérica que compitieron con delegación completa y Lucca se metió en el top 5, junto a grandes ‘monstruos’ de la WSL. De los ocho mejores, seis están en el ránking WSL y solo dos compiten a nivel regional: uno de ellos es Mesinas y otro, el local Ohhara.

Si bien Lucca fue el mejor ubicado, el personaje de estos Juegos fue también Sofía Mulanovich. Con sus 38 años cumplió el sueño olímpico que empezó, quizás, cuando apenas tenía 13 y ya era parte del Mundial ISA 1996 –junto a Kina Malpartida– y se metía en el puesto 17 del evento.

Luego llegaron los títulos, el CT del 2004 y los ISA de ese mismo año y del 2019. La vida le permitió cumplir el sueño olímpico mientras Theo, su hijo, lo mira por las pantallas. La alegría es doble para Sofi y para el país entero.

Lucca, Tudela y Rosas crecieron admirando a Sofía y estos tres días estuvieron compartiendo el sueño olímpico. Ellos no habrán ganado medalla, pero han dado ese enorme gran paso para su deporte. “Son una potencia y es excelente que el país lo sepa. El reconocimiento de que dos surfistas hayan sido los abanderados es una señal gigante”, nos dice Zanocchi, y es para tener en cuenta.

—Tiro en el corazón—

De pronto un día vemos cómo Nicolás Pacheco se quiebra por no pasar a la final. Ahora vemos imágenes del joven Nicolás cuando a sus 17 años se alistaba para ir a Londres 2012. Un adolescente olímpico evolucionó con mucho entrenamiento para ahora disputar una muerte súbita con Vincent Hancock, a quien vio ganar el oro hace nueve años y al que ahora exigió al máximo.

El tiro es y siempre será una gran carta por el legado que arrastra. “Lo de Nicolás es sobresaliente. Disparó 123 platos y el récord olímpico que se hizo fue de 124”, nos comenta Khalid Qahhat, experimentado tirador peruano y ahora directivo de la Federación de Tiro.

El tiro tiene un rico pasado que Nico ha respetado y puesto en alto en Tokio 2020. Aquellos 109 platos que rompió hace nueve años hoy se convirtieron en 123 que lo hubieran metido en la final por la medalla, pero una penalidad le quitó esa chance.

Sin embargo, esto no se detiene en los Juegos Olímpicos. Marko Carrillo, recientemente cuarto en una Copa del Mundo, espera estar fino en los 25 m con pistola. La expectativa no conoce pausa en este deporte que tantas alegrías acumula para nosotros. Tenemos tres diplomas hasta el momento, pero el reconocimiento es también para cada uno de los 35 clasificados que pisan Tokio. El juego es de ellos para alegría de nosotros.