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LA ILUMINACIÓN EN LOS EDIFICIOS LIMEÑOS SE HA CONVERTIDO UNO DE LOS ELEMENTOS MÁS RELEVANTES PARA DIFERENCIARSE Y AUMENTAR VALOR. LOS ESPECIALISTAS EXPLICAN POR QUÉ.

P O R E V E LY N C O L O M A

Cuatro espacios de luz

¿POR QUÉ LIMA no tiene un skyline? La falta de una silueta de las estructuras y edificios más altos de la ciudad no se debe solo a la inexistencia de rascacielos limeños. Según los entendidos, se explica, por un lado, por el desarrollo urbano desordenado que no sigue un plan que defina una zona específica para lo que se conoce como el central business district, que en la capital está desperdigado en varios distritos. Y, por el otro lado, no hay una normativa que separe a los edificios altos, por lo que en avenidas como Javier Prado, donde se permite construir 20 pisos, cada inmueble se encuentra pegado a su vecino borrando cualquier intento de silueta.

Pero tener los edificios juntos no solo afecta a la estética de la ciudad; es más peligroso desde el punto de vista sísmico y produce corrientes de viento.

El arquitecto José Orrego, director de Metrópolis, señala que esta disposición dificulta también las entradas de luz natural de los inmuebles, por lo que, si el edificio no está ubicado en una esquina, difícilmente podrá conseguir más de dos fachadas, una al frente y una posterior.

En este contexto, la solución que ha encontrado más de un especialista es sacrificar unos metros cuadrados con tal de crear una distancia con el vecino y así propiciar las condiciones para levantar un edificio de cuatro fachadas que aproveche al máximo la luz natural. El edificio de oficinas Sky Tower en Magdalena, diseñado por el equipo que lidera Orrego, es un ejemplo de esta práctica.

ROL CLAVE

Orrego opina que la luz debe ser tratada como un material arquitectónico más que forma parte del proyecto, mientras que Álvaro Chang Say, director creativo de Armando Paredes, asegura que el buen uso de la luz natural es la base de cualquier diseño.

“Permite crear espacios más iluminados y ventilados, al mismo tiempo que genera la sensación de amplitud y apertura. Por esto, la luz cumple un rol sensorial y funcional”, sentencia Chang Say.

Y es que los especialistas coinciden en que según la intensidad de la luz o cómo esta está distribuida se pueden generar diferentes ambientes, ya sea en viviendas, oficinas o locales comerciales.

De hecho, la demanda de los peruanos, tanto para sus departamentos como para casas, valora cada vez más la iluminación interior y ya es común ver el uso estratégico de la luz en restaurantes, malls y hoteles, donde se busca cambiar de ambiente según la hora del día o para algún evento específico.

Tampoco es secreto que una buena iluminación tiene una influencia directa en la productividad de los trabajadores en sus centros de labores, al igual que en su estado de ánimo, por lo que naturalmente se prefieren los espacios con acceso a la luz natural. El edificio Leuro, ubicado en Miraflores, el único en Lima con certificación Platinum en Leed (siglas en inglés de Liderazgo de Energía y Diseño Medioambiental), ofrece contacto visual con el exterior en más de un 90% de sus espacios.

Las oficinas de Roche Perú, localizadas en la avenida Dionisio Derteano en San Isidro, que obtuvieron la certificación Leed Oro en el 2010, también destacan por el uso de la luz, donde se combina el aprovechamiento de la luz natural y la tecnología: mediante fotosensores ubicados en el falso techo se mide la cantidad de luz natural en un espacio, adaptando la luz eléctrica, en conjunto con las cortinas, para cada zona de una habitación. De esta forma se ahorra energía y se mantiene un ambiente uniforme, iluminado y cómodo.

Orrego refiere que, a pesar de ello, las normativas en el país para la construcción de viviendas y oficinas limitan un aprovechamiento eficiente de la luz natural, ya que, cuanto más alto sea el edificio o más pisos tenga, se deben construir más pozos de luz perdiéndose así metros cuadrados por entradas de luz con poco impacto.

Visto desde el punto de vista del negocio, Giancarlo Malatesta, director de la consultora inmobiliaria Binswanger, anota que en un mercado de oficinas con muestras de sobreoferta el uso de la luz es clave a la hora de decidir la compra o el alquiler de un espacio.

“Hace siete años se vendía todo, incluso edificios con dos fachadas mal iluminados tenían éxito, pero hoy los consumidores tienen la sartén por el mango y pueden tomarse más tiempo para decidir y analizar qué tan bien iluminado está un espacio. Muchas veces, sin ser conscientes, los clientes simplemente se sienten mejor en una oficina con buen uso de luz”, comenta

Malatesta.

TAMPOCO ES SECRETO QUE UNA BUENA ILUMINACIÓN TIENE UNA INFLUENCIA DIRECTA EN LA PRODUC PRODUCTIVIDAD CTIVIDAD DE LOS TRABAJADORES EN SUS CENTROS DE LABORES, AL IGUAL QUE EN SU ESTADO DE ÁNIMO.

Para los especialistas, pues, en la medida que el éxito comercial tanto de los edificios corporativos como residenciales se hace evidente, los inversionistas inmobiliarios van a seguir las experiencias exitosas, replicando diseños arquitectónicos de calidad donde la luz no es un mero accesorio.

LO QUE SE VE

Aunque demanda planeamientos y diseños, la iluminación en interiores y el aprovechamiento de la luz natural llega a significar una cuestión sensorial para los consumidores finales, tal como explica Chang Say. No obstante, al hablar de luz en arquitectura se incluye la iluminación exterior, que es la más apreciada por los demás habitantes de la ciudad.

Malatesta coincide con Orrego en que las luces que iluminan los edificios se convierten en un factor diferenciador, altamente valorado en los locales corporativos que buscan destacar en la ciudad, por lo que firmas como Interbank y BCP, entre otras, así como la Universidad del Pacífico (UP) también aprovechando las nuevas tecnologías han apostado por los softwares que permiten crear formas con las luces y cambiarlas de color de forma automática.

“Es importante iluminar el edificio hacia la ciudad. Y las soluciones creativas pueden ir hasta lo que se hizo en el edificio del BCP en San Isidro, que es prácticamente una escultura vertical sobre la fachada. De lo contrario, se puede optar por ligarla a la línea de negocio de la firma, como en el proyecto de la Universidad del Pacífico, donde buscamos darle personalidad al edificio con una imagen tecnológica”, ejemplifica Orrego.

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2017-03-30T07:00:00.0000000Z

2017-03-30T07:00:00.0000000Z

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